Perspectiva hacia 2020: Joel Friedman, CTO de Rackspace, ofrece sus predicciones para el próximo año

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Looking ahead to 2020 – Joel Friedman, Rackspace CTO, offers his predictions for the upcoming year

A medida que entramos en 2020, las nubes híbrida y múltiple continuarán sumando adeptos, al igual que el software como servicio (SaaS). La seguridad sigue siendo un reto, y la informática de vanguardia ganará terreno, pero pronostico que será de una forma más modesta de lo que sugiere la propaganda exagerada actual.

Predicción 1: Las nubes híbrida y múltiple seguirán en ascenso

Las organizaciones inteligentes han centrado su atención en los beneficios de ejecutar aplicaciones y datos en los lugares que tienen más sentido, ya sea en la nube privada o pública, colocación o, más comúnmente, como una combinación a la medida que puede evolucionar conforme dictan las necesidades y recursos comerciales. Sin embargo, la complejidad de administrar nubes múltiples a lo largo de las dimensiones de costos, seguridad, gobernabilidad, identidad y patrones de DevOps seguirá en aumento en 2020. Esta complejidad se relaciona con la dependencia forzada de una multitud de plataformas, la velocidad del cambio tecnológico, las irrupciones en los modelos tradicionales de entrega de servicios y en una escasez real de habilidades requeridas para unir todo. Debido a estos factores, es muy probable que prevalezcan las soluciones de nube múltiple, aunque se intensificará la búsqueda de ayuda externa calificada. Encontrar ayuda externa puede resultar difícil, ya que los proveedores de servicios administrados no solo necesitarán mantener una instancia de nube múltiple o híbrida, sino que los proveedores internos y externos también necesitarán trabajar juntos para manejar una multitud de problemas relacionados con la gobernabilidad de costos, seguridad y etiquetado, por nombrar algunos. Afortunadamente, 451 Research encontró que estos problemas pueden resolverse con una comunicación clara y flexibilidad de parte de todos los asociados.

Predicción 2: SaaS = problema resuelto

Además de la infraestructura, una de las estrategias de la nube que he escuchado repetidamente mientras trabajo con clientes es que “la nube primero” empieza con SaaS. No quieren reinventar nada desarrollando aplicaciones para problemas “resueltos”. Las ofertas maduras de SaaS son la culminación de muchas iteraciones con las funciones obligatorias del cliente, análisis de la experiencia del usuario e, igualmente importantes, las mejores prácticas de la industria relacionadas con los flujos de trabajo de procesos. En muchos casos, veo organizaciones que eligen ajustar sus procesos internos para que se adapten mejor a la implementación de su proveedor de SaaS, en lugar de siempre optar por personalizar la plataforma para que se adapte a sus flujos de trabajo heredados. Además, SaaS tiene un efecto compuesto con los datos; una vez que los datos están en el sistema, otros actores del ecosistema pueden ofrecer servicios de integración llave en mano y complementos, mejorando más el valor de la propuesta de SaaS. Aunque no es necesariamente una nueva tendencia, pronostico que esta será la norma en 2020 y espero ver cada vez más aplicaciones de nicho y con enfoque vertical que se desarrollan como un modelo SaaS.

Predicción 3: La seguridad sigue siendo una lucha

Cuando se trata de seguridad, muchas organizaciones tienen la carga de los sistemas heredados plagados de deudas técnicas y las vulnerabilidades de seguridad correspondientes. Comprenden la necesidad de aprovechar las infraestructuras de seguridad compatibles con la nube, los modelos operativos y las herramientas para operar de manera segura en ambientes nativos de la nube, pero esto puede ser lento y difícil. La mayoría de las industrias simplemente no han alcanzado el punto en el que se han implementado prácticas maduras de seguridad en la nube, y esto crea un terreno fértil para los incumplimientos. Muchas siguen intentando aplicar controles y metodologías tradicionales de seguridad en los ambientes e implementaciones nativos de la nube. En general, esto no funciona bien; no solo es probable que la implementación de seguridad no esté bien ajustada, sino que también crea un obstáculo para los beneficios de agilidad que desea la organización. En ocasiones, esto lleva a la fragmentación, donde las unidades de negocio se ocupan la seguridad central e implementan una seguridad propia de respaldo. Los riesgos de esto son más que obvios. En 2020, creo que la nube seguirá presentando algunos problemas incluso para las organizaciones más nativas y digitales y de pensamiento vanguardista. Estas organizaciones comprenden cómo la nube puede ayudar para que sus negocios avancen rápido, pero aún no tienen la madurez para implementar un control de postura en tiempo real o justo a tiempo, así como protocolos de "menor privilegio" en el efímero, complejo y siempre cambiante mundo de la nube múltiple. Mientras los equipos de seguridad se quedaron en el obsoleto mundo de las aplicaciones y plataformas heredadas inseguras (las que no pueden o no deben ser modernizadas), y la relativa novedad de los modelos operativos en la nube, desafortunadamente preveo que seguirán los titulares de incumplimientos en 2020, además de todo el monitoreo gratuito de créditos que podamos manejar. Incluso cuando los equipos de seguridad se pongan de acuerdo en el concepto de que es posible estar más seguros en la nube, muchos no tienen infraestructuras de seguridad compatibles con la nube, ni modelos operativos y herramientas para ayudar a la empresa a operar de manera segura en ambientes nativos de la nube.

Predicción 4: el plano de control de la nube será la norma

En los últimos años, ha existido una tendencia en la que el plano de la administración se ha revertido del centro de datos hacia la nube. Para los primeros en adoptar la nube, el centro de datos seguía siendo el punto de control central. Las organizaciones irrumpieron en la nube o tenían proyectos back-end sin acceso a internet. Conforme la nube creció en popularidad, cada vez más proyectos nuevos se volvieron nativos de la nube. Por supuesto, muchos siguen integrándose con nubes en las instalaciones o nubes privadas alojadas para la identidad e inteligencia de la empresa u otros requisitos de enriquecimiento de datos, pero los hiperescaladores ya dejaron de negar que la nube híbrida es real (en un intento de capturar todas las cargas de trabajo) y cambiaron su estrategia para capturar esas cargas de trabajo de centros de datos donde se encuentran y las están llevando a su ecosistema. Esto incluye Snowball Edge, AWS RDS de VMware, Azure Stack/Azure ARc y Google Anthos. Espere ver muchos servicios así en 2020. Y, ¿por qué no? Los proveedores de la nube han demostrado su eficacia para operar de manera segura a escala y habilitando todo mediante API.

Predicción 5: La vanguardia ganará terreno moderado

La informática de vanguardia es una nueva frontera: ningún actor domina actualmente este espacio, ya que es un mercado fragmentado por naturaleza. Al escoger ubicaciones sobre plataformas para abordar mercados locales, soberanía de datos y otras necesidades específicas del caso de uso, creo que es posible que las organizaciones quieran alinear una metodología coherente y tecnológicamente neutra. Y, con base en las tendencias del año pasado, los contenedores y los sistemas sin servidores parecen ser un beneficio natural de la vanguardia. Y, aunque Kubernetes domina el área de coordinación de contenedores, los sistemas sin servidores son otra historia en la que, hasta ahora, no hay vencedores. Las plataformas de cómputo en la nube de AWS, Azure y Google tienen características propias de función como un servicio (FaaS), que están integradas en sus ecosistemas de nube respectivos. ¿Ganará terreno OpenFaaS con kNative con base en los estándares abiertos, abordando el potencial de movilidad y evitando las ataduras de los que se ha estado hablando? Ya lo veremos. De cualquier manera, predigo que 2020 tendrá mucha innovación y exploración en el espacio de vanguardia, pero sospecho que este será el año para ganar impulso y que las compuertas no se abrirán sino hasta 2021.